La huelga del 29M ha exigido enfrentar la campaña de propaganda gubernamental, y el miedo y la coacción con la que los empresarios han intentando evitar la huelga aprovechando la precariedad y el paro masivo. A pesar de ello millones de trabajadores y trabajadoras, en activo o en paro, precarias, sumergidos o jubiladas o estudiantes, enfrentaron el miedo y la desmovilización y secundaron la huelga, saliendo a la calle a decir basta, enfrentando la represión policial, y las represalias empresariales, lo que debe comprometer a todas las organizaciones sindicales en no ceder en la lucha iniciada, hasta conseguir el objetivo de echar abajo la reforma laboral.
El apoyo a las movilizaciones de las organizaciones y movimientos sociales críticos con el pacto social y la política de cesiones de derechos que han impulsado hasta la fecha CCOO y UGT, con un importante protagonismo de CNT en las movilizaciones y piquetes, ha sido especialmente importante este 29M, poniendo de manifiesto el apoyo social a la exigencia de derogar de la reforma laboral y poner fin de la política de recortes sociales, no aceptando negociaciones y pactos que maquillen sus aspectos más llamativos pero acaben en una nueva cesión de derechos.
Para ello CNT continuará trabajando junto a otras organizaciones sindicales contrarias al pacto social para impulsar nuevas movilizaciones y convocatorias, que exigirán de movilizaciones que vayan más allá de los paros de 24 horas.